martes, 30 de noviembre de 2010

Esta historia fue en octubre... la encontré en borradores y decidí publicarla hoy...

Vengo llegando de una ciudad vecina, porque fui a visitar a un "amigo especial" que vengo conociendo desde hace un tiempo atrás. Digo así, "amigo especial" porque todo partió un día por internet, como amiguitos vistuales, a lo nerd... y no sé, esas cosas de la vida... hizo que me fuera gustando él ya no sólo como un amiguito imaginario casi que me hacía reir y me atraía por ser tan diferente a mí.

Diferente a mí... su estilo, forma de pensar, de vestir... Un tipo especial ante mis ojos, diferente. Inmaduro a su edad como muchos, pero es que quizás este se ha ido un poco "al porcino". Sin embargo, siendo así, aún no llega al nivel de molestarme... mientras, sólo me causa ternura... no puedo evitar verlo como niño... a sus 5 años más que yo...

Me durará el encanto?... quién lo sabe, no?. Creanme que lo pensé bastante antes de irme a embarcar en esto que recién comienza. Lo pensé mucho, y temí incluso por mi integridad sentimental... porque no quiero más pasteles, creo que ya he probado suficientes, y aún no entiendo el por qué. Quizás ahora denuevo me esté equivocando, y quizás incluso cuando realmente lo note ya esté metida en esto hasta el cuello y salga con alguna que otra pérdida, pero me decidí ya a dar un pasito... una vez que vi que él estaba empezando a darlos hacia mí.

Es que me gustan los hombres distintos, algo tienen que tener que los haga interesantes q mis ojos, y siento que él tiene algo que deseo descubrir. Para eso me acerqué, para intentar ver detrás de su imagen y de su escudo. El vino a verme aquí, a mi ciudad, en bus, la primera vez... cuando lo vi me gustó, fisicamente me gusta, parece hombre, y al ir conversando con él me hizo reir tanto, que omití ciertas cosas que tal vez no fueron taaan de mi agrado, como su "guata ponchera". La segunda vez viajé yo a su ciudad, caché que maneja maoma nomás según yo; conocí su casa y hasta a su viejo, ya que por perder una pega tuvo que volver a vivir con sus padres (ok, yo aun no me voy, así que no alegaré, hasta el próximo año). Aquella vez que fui lo besé por primera vez, fueron besos cortos, sentí que quizás imaginé que era más pasional de lo que realmente era, esa noche cuando me venía de vuelta me invitó varias veces a quedarme en su casa, pero yo, sin conocerlo aún suficiente, no accedí.

La tercera vez vino él nuevamente a verme. No lo besé en todo el día que estuvimos juntos... lo noté distante y eso me atemorizó, creí que quizás ya no estaba seguro de eso que le pasaba conmigo así que me quedé distante observándolo, como suelo hacer cuando algo me provoca inseguridad. Él tampoco me besó, sólo mencionó querer hacerlo, pero no tomaba la iniciativa... nuevamente noté que quizás no eran tan atrevido como en un comienzo imaginé. También ese día me invitó a carretear con él a su ciudad, y quería que me fuera con él. Yo, nuevamente desconfiando y con temor no sé de qué, le dije que no... algo de lo cual me arrepentí rápidamente camino a casa en la micro.

Esta historia quizás va a acontinuar....

No hay comentarios:

Publicar un comentario